lunes, 5 de marzo de 2012

Manifiesto fundacional



MANIFIESTO DE APOYO PARA LA ATENCIÓN
DE LAS PERSONAS EN SITUACIÓN DE DEPENDENCIA

En los últimos meses, el Gobierno de Navarra, ha aprobado una serie de recortes presupuestarios que menoscaban derechos y garantías para la atención de las personas en situación de dependencia, de forma muy dura en lo que afecta al apoyo económico para mantenimiento de su autonomía. De ellos, algunos se derivan de recortes previos realizados por el Gobierno del Estado pero la mayoría son fruto de decisiones políticas del Gobierno de Navarra y de la Consejería de Política Social en particular, que se suman a otros en un proceso de deterioro del Estado de Bienestar.

En la C.F. de Navarra se ha hecho una aplicación de la  Ley 39/2006, de 14 de diciembre, de Promoción de la Autonomía Personal y Atención a las personas en situación de dependencia, parcialmente contraria al espíritu de la misma. La Ley plantea que para responder a las necesidades de atención de las personas dependientes se abordaría la atención mediante servicios fundamentalmente y, con carácter excepcional, se concederían ayudas económicas. Su finalidad es construir un Sistema de Atención a la Dependencia, que financiará los servicios y las ayudas que necesitan las personas dependientes, contribuyendo a la generación de empleo y al desarrollo del Estado de Bienestar.

El mantenimiento de la persona dependiente en su medio ha sido un objetivo a conseguir por la Ley estatal de Autonomía Personal, la Ley Foral de Servicios Sociales y la Cartera de Servicios Sociales. Los Servicios de Atención a domicilio, los Centros de Día, las estancias temporales y las prestaciones económicas han contribuido a que muchas personas dependientes no hayan precisado de un ingreso definitivo en un Centro Residencial. Sin embargo las últimas  medidas adoptadas parecen encaminadas a favorecer los ingresos definitivos en Centros Residenciales.

Recortes realizados (Menoscabo de derechos y garantías para las personas con dependencia)

En lugar de aprovechar el amplio marco competencial y fiscal de la Comunidad Foral para corregir los desequilibrios en la aplicación de la Ley de Promoción de la Autonomía Personal y Atención a las personas en situación de dependencia, las decisiones políticas del Gobierno de Navarra y de la Consejería de Política Social en particular, han ido en la dirección contraria a recortar prestaciones, hacerlas incompatibles, dejar a las personas dependientes en peor situación. Así, cabe destacar los siguientes recortes:

1. La Orden Foral 103/2011, de 21 octubre, de la Consejera de Política Social, Igualdad, Deporte y Juventud, ha establecido la incompatibilidad de algunas prestaciones recogidas en la cartera de servicios en el ámbito de atención a la dependencia de conformidad con la cual se consideran incompatibles la Ayuda económica para la permanencia en domicilio de personas dependientes y apoyo a las personas cuidadoras de éstas con el Servicio de Centro de día. Así mismo, el Servicio de Centro de día con el Servicio de Atención a Domicilio (SAD) municipal.

Estas incompatibilidades, han llevado a que 160 personas mayores y 164 personas con discapacidad que compatibilizan la ayuda económica para la permanencia en domicilio de personas dependientes y apoyo a las personas cuidadoras de éstas con el Servicio de Centro de día, hayan tenido que elegir entre una ayuda u otra.

2. El Decreto-Ley Foral 1/2011, de 6 de octubre, eliminó de la Cartera de Servicios Sociales la subida automática del IPC al concluir el año, en todas las ayudas de la Cartera, y por tanto también, a las más de 15.000 personas que son beneficiarias de las ayudas a la dependencia, con la consiguiente pérdida de poder adquisitivo para estas personas de algo más del 2%. 

3. La aprobación, el pasado mes de diciembre, de la Ley Foral de Presupuestos Generales de Navarra para el año 2012, ha supuesto, entre otras cuestiones, la disminución de los importes mínimos y máximos de las ayudas económicas para la permanencia en el domicilio de las personas dependientes y apoyo a las personas cuidadoras de estas, un recorte que va del 11% al 39% según el grado de dependencia y la renta familiar.

4. En la Orden Foral 247/2011 de 23 de diciembre, se eliminan igualmente las ayudas económicas para la contratación de un servicio en materia de dependencia.

5. Como consecuencia de una decisión del anterior Gobierno del Estado, en lugar de concederse las ayudas a la dependencia desde el momento de la solicitud, se pasa a abonar desde el momento de la resolución favorable. Con esta decisión que Navarra podía no aplicar (como se ha hecho en el caso de las ayudas a las personas dependientes moderadas nivel 2), los beneficiarios de las ayudas han perdido la ayuda en torno a 6 meses de media, que es lo que cuesta aproximadamente el proceso de valoración de la dependencia y su resolución.

6. A todos estos recortes en los derechos de las personas dependientes, hay que sumar los recortes presupuestarios para el año 2012 que afectan a aquellas personas que necesitan recursos especializados diurnos y residenciales. Los recortes han afectado gravemente a la disponibilidad de plazas públicas y concertadas y a las inversiones en nuevos servicios que debieran formar parte del sistema de atención y promoción de la autonomía. También se han eliminado las ayudas técnicas a la movilidad, el programa de vacaciones para las personas con discapacidad y reducido un 29,41% en las ayudas a las asociaciones que trabajan en materia de discapacidad que en muchos casos se van a ver afectados programas dirigidos a personas que además de contar con alguna discapacidad son dependientes.

Repercusiones para las personas en situación de dependencia

- Disminución muy importante de los recursos que las personas en situación de dependencia van a disponer para su atención, las cuales en muchas ocasiones estaban ya en una situación económica muy difícil, precisamente por las dificultades derivadas de la dependencia y la atención que esta requiere.

- El empeoramiento de la atención a las personas dependientes, al no poder compatibilizar ayudas  imprescindibles para la realización de las actividades básicas de la vida diaria  y no poder contar con ayudas para contratar a personas para los cuidados en el hogar.

- Un posible aumento de la institucionalización de las personas dependientes, y la ruptura del espíritu de la ley que prioriza fundamentalmente la permanencia de las personas en sus domicilios y entorno, el mayor tiempo posible.

- Una importante disminución en los puestos de trabajo que es capaz de generar el Sistema de Atención a la Dependencia, al eliminarse las ayudas a la contratación, disminuir las ayudas a las asociaciones, y no ampliar suficientemente servicios como el Servicio de Atención a Domicilio o las plazas de Centros de Día.

- Un aumento muy duro de la sobrecarga de las personas cuidadoras de personas en situación de dependencia, con el empeoramiento de sus condiciones de vida personal y familiar, así como de sus posibilidades de compatibilizar la vida social y/o laboral con los cuidados.


PORQUE se trata de una cuestión de justicia social, de apoyo al cuarto pilar del bienestar, de que las personas más vulnerables no paguen las consecuencias de la crisis económica, de procurar una adecuada atención a las más de 15.000 personas dependientes de Navarra y a sus familias, y de no retroceder en derechos y conquistas sociales que tanto ha costado materializar, desde la Plataforma para la Defensa de los Derechos de las Personas en situación de Dependencia.

EXIGIMOS:

  1. La anulación de todos los recortes en materia de Atención a la Dependencia
  2. El desarrollo a medio plazo de servicios de apoyo conforme a las bases que la Ley de Dependencia establece.
  3. La habilitación, vía presupuestaria, de la financiación suficiente para el mantenimiento del conjunto del Sistema de prestaciones y ayudas a la Dependencia.


Pamplona/Iruña Febrero 2012